En el vasto universo de Spider-Man, los villanos a menudo compiten en carisma, peligro o profundidad psicológica. Pensamos en Norman Osborn, el Duende Verde, Sandman o incluso Venom. Pero entre esta galería a veces aterradora de supervillanos, también hay algunas figuras... digamos, más inusuales. Y como tal, Big Wheel es posiblemente uno de los antagonistas más atípicos (y burlados) en la historia de Spider-Man.
¿Quién es Big Wheel en los cómics?
Big Wheel apareció por primera vez en Amazing Spider-Man # 183 (1978), es el alias de Jackson Weele, un hombre de negocios corrupto que intenta escapar de sus deudas contratando al villano Rocket Racer. Pero traicionado y humillado, recurre al científico que diseñó la patineta de Rocket Racer... para pedirle que construya un vehículo gigante con forma de rueda. Sí, una rueda. De ahí su nombre: Big Wheel.
Montado en su rueda de combate cargada de armas, Weele decide entonces vengarse... aplastando literalmente a sus enemigos. Un intento rápidamente detenido por Spider-Man, quien no tuvo dificultad en neutralizar a este grotesco "supervillano".
Un chiste que se ha convertido en un clásico de culto.
Si bien Big Wheel fue ridiculizado desde su primera aparición, paradójicamente ha ganado una especie de estatus de culto entre los fanáticos. Su presencia en el ranking de los peores villanos de Marvel es casi sistemática. Pero esta imagen también le ha valido algunos regresos irónicos en los cómics modernos, donde es retratado como un personaje cómico o patético, o incluso entrañable a pesar de sí mismo.
Esta figura, tan absurda como poco convencional, forma parte de la tradición de los villanos “fallidos” de Marvel. Y eso es lo que hace que sea un tema tan interesante para retomar hoy. En una época en la que todo se ha vuelto oscuro y complejo, Big Wheel nos recuerda que incluso los cómics más serios tienen sus momentos de ligereza.
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¿Un reflejo de las limitaciones creativas de la época?
Big Wheel se cita a menudo como ejemplo de los excesos creativos de los años 70 y 80, un período en el que Marvel (como DC) experimentó enormemente, a veces hasta el punto del absurdo. Tras introducir enemigos complejos como el Doctor Octopus o el Lagarto, algunos autores probaron conceptos más arriesgados, incluso completamente fuera de lo común. Big Wheel encarna esta tendencia a querer sorprender a toda costa, incluso si eso significa crear un personaje tan poco amenazante que resulte ridículo.
Pero detrás de esta excentricidad, también podemos ver un intento de humanizar a los villanos. Jackson Weele no es un científico loco ni un extraterrestre: es un hombre de negocios fracasado, impulsado por sus errores y su orgullo. En esto, refleja una forma de vulnerabilidad que rara vez se muestra tan directamente en los antagonistas.
Apariencias más modernas
Sorprendentemente, Big Wheel no desapareció por completo después de su debacle inicial. Ha resurgido en algunos cómics recientes, a menudo utilizado como un recurso cómico o como un guiño a los fans de toda la vida. En Deadpool o alguna serie derivada, incluso aparece brevemente en secuencias absurdas o paródicas. Marvel ha transformado con éxito este personaje fallido en una herramienta metanarrativa, resaltando con humor sus propios momentos de debilidad editorial.
Esta capacidad de burlarse de las propias creaciones contribuye a la riqueza del universo Marvel y al apego que los fanáticos tienen hacia él. Spider-Man, con sus altibajos, sus tragedias y sus bromas, siempre ha sido el hogar de los personajes más extremos… incluido Big Wheel.
Big Wheel: Ridículo, pero inolvidable
A pesar de su diseño extravagante y sus motivaciones cuestionables, Big Wheel es uno de esos personajes secundarios que nunca olvidas. Es la encarnación perfecta de lo que hace que el universo de Spider-Man sea tan rico: su capacidad de oscilar entre el drama profundo, la acción espectacular y el absurdo total. Incluso los villanos más olvidados contribuyen a la identidad y diversidad del universo.
Y por eso también es tan popular: porque representa una época, una audacia creativa, y sigue haciendo sonreír a los lectores, 40 años después de su creación. En un mundo de supervillanos cada vez más oscuros y complejos, a veces es bueno recordar que un gran villano también puede ser... una gran rueda.
Conclusión
Big Wheel puede permanecer para siempre a la sombra de Green Goblin, Venom y otros grandes enemigos de Spider-Man. Pero se ha ganado su lugar en los corazones de los fans por otra razón: encarna ese elemento de autodesprecio, experimentación y libertad que hace que Marvel sea único. Un villano que conduce a 100 millas por hora... en nuestros recuerdos, al menos.